miércoles, 20 de abril de 2016

Marta Zabaleta


Confidencias

Desde el patio
me mira
con sus ojos grandes.

Dejo de saborear la sopa.
¿Qué buscará desenterrar
del saber de la tierra?
Me observa, como si mi vida fuera
un pedazo de cielo. Lo miro
hipnotizada. No me muevo. Pero recuerdo
que él era así, como este pájaro.

¿Qué hace? ¿escucha? ¿descansa? ¿o es que me espera?

¿O como yo, solo y con frío, me buscará un día entre las piedras?

Ahora se ha parado, y piensa.
Da unos pasos.

En mi jardín, ¿qué busca?
Tal vez, que brote allí
el amor que nos dimos.

Es grande, gracioso. Bello.
Como el de aquella tarde
en que desnudos
bajo los juncos, desfloramos
un arrebol de copihues y guitarras
y emborrachó mi canto
un mar de estrellas.

Con mi sonrisa parte, sobre los
Andes vuela. Es tuya,
y con amor la lleva.

                         31 de diciembre 2014


Soledad en pleno invierno

Respiro hondo. 
Por la ventana veo 
las últimas luces de la tarde.
El mar se aquieta.
A mis espaldas
las plantas crecen.
Afuera, los narcisos florecen.
Dos ardillitas
juegan a la escondida,
Suben y bajan
por el tronco del árbol
que paciente
las sostiene.
Y los pájaros
que vuelven a sus nidos
alegran mi jardín de invierno.
Sus tempranos trinos
quebrarán también
la noche desvelada.
De pronto, suena el timbre
¿Será el eco de la muerte
que me dice “Aún estás viva”?
Y me duermo.
Pero suena de nuevo…
Era el servicio 
de la farmacia,
El joven me entrega
quince remedios,
Son gratis. Firmo. Y me dice
“Abríguese bien que se viene
una gran tormenta”
Really? I answer.
Cannot you see the sky?
he says
Le doy un beso.
Canta un zorzal.
Estoy viva…


Cárcel de espuma

       dedicado a mi hija Yanina Andrea Hinrichsen

Flores diminutas para prensar.
Habitan en mis manos
con el peso del viento.
Alimentan recuerdos.
Recorren mi sonrisa.
Hacen guiños al mar.

Sobresale la escollera
que se aprieta en mi cueva
desnudando la espera
de la diosa del tiempo.
Enroscada en la proa
con soberbia y sin miedo
a la noche confunde
entre tango y danzón.

Firme la brisa
corta la cara
que el sol marchita.
Parte la lancha
y en su vacío
cae mi almohada.
Prensa de esperas
pena la rabia. El sol
se agita. Mis labios
cantan.

Como los pájaros
de rama en rama
ceno piando mientras
la luz y el día
se va
se van…

              
Epping, 9 de octubre 2010


Marta Zabaleta
Nació en Santa Fe, Argentina. Reside en Londres, Inglaterra

8 comentarios:

  1. Muchas gracias, Analia, por tu apreciación y difusión de mi poesía. Cálidos abrazos desde un bosque en primavera.Bellísimo!...

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    1. Muchas gracias a vos, mi querida Marta, siempre es un gusto contar con tu voz en esta revista literaria.
      Muchos cariños, que estés muy bien
      Analía

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  2. qué manojo maravilloso de poemas!! la naturaleza y tup alabra poética, marta, conspiran esta noche, se entrecruzan con la propia emoción. susana zazzetti.

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    1. Agradezco tu lectura y tus conceptos, Susana.
      Saludos cordiales
      Analía Pascaner

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  3. La poesía de Marta nos induce a atisbar los secretos de los jardines de Epping... También sus perfumes llegan hasta Buenos Aires.
    Gracias, Analía. Una curiosidad; acaso la segunda foto del panel de la derecha fue tomada en Toledo?
    Besos a ambas, Lina

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    1. Gracias por tu lectura y tus conceptos, Lina.
      Y sí, esa fotografía es de uno de los tantos pasajes de Toledo, fascinante y misteriosa ciudad, verdad?
      Cariños, que estés muy bien
      Analía

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  4. Aún conmovida por la lectura de sus poemas, Marta...cada uno de ellos habla con su corazón. Y encuentra eco en el mío. Gracias. Y también a Analía, que los comparte. Feliz Vida, mujeres !

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    1. Agradezco tus conceptos y tu lectura, Miryam.
      También feliz vida para ti :-)
      Analía

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