domingo, 24 de septiembre de 2023

Haidé Daiban

El signo 

El signo en el nombre, 
el nombre en la palabra 
y ella en medio de mi frente. 
Medra en pensamientos y figuras, 
Imágenes que se rearman 
             y disfuman. 
Por dentro y por fuera 
tu figura en tu nombre 
y mis pensamientos 
             en tu nombre,
que es palabra  
             y es signo… 


Un nido, nuestro mundo 

     Entra, amor, 
     entra a la casa, 
     la puerta siempre abierta 
     te espera. 
   En la oscuridad 
   de este cuenco perfecto,
   tus ojos y sus destellos 
   nos iluminarán 
   y el abrazo imperfecto, 
   hondo y protector, 
   sanará nuestra dolorosa soledad. 
Quédate aquí, 
rodeado de estos muros 
que también nos abrazan, 
en este hogar sin aristas, 
redondo como un mundo. 


No, no a ti 

No, no a ti 
padre amoroso 
de hijos palpitantes. 
No, no a ti 
madre protectora 
de dulce mirada. 
No, no al obrero 
de esta tierra
ayudando a un futuro 
que ya no es prístino ni calmo. 
No, no a ti
amigo de días felices 
y cielos centellantes. 
No, no a ti 
que tanto luchaste, 
tu mano extendida 
en el alerta cotidiano. 
No alzaré mi Arma 
ni mi palabra hiriente 
no destruiré tu esperanza, 
solo rezaré contigo 
por la Paz prometida,
por el camino justo 
por un sol naciente. 


El son de la inundación

Blues de la inundación 

Volviendo a la casa, negro, 
el agua se la llevó. 
Negras olas, negra el agua, 
la que todo lo inundó. 
Un manto de espuma blanca 
cubre su honda pena de hoy. 
Las lágrimas acaudalan 
al río, rey    y   señor. 

Las negras y las corcheas, 
en su piano que se ahogó 
cantarán un negro himno 
el blues de la inundación 
Negro huye, negro aúlla 
Carga su desolación. 
Lleva y trae el río negro, 
lo poco que se salvó. 

Los peces flotan su muerte, 
los gritos son un adiós, 
sus sones fueron tapando 
la víspera de ilusión. 
Blues de llanto, blues de duelo 
New Orleáns, requiem-dolor. 
Los cuerpos naves del río 
bailan negra procesión. 
Y nadie pide perdón. Y nadie pide perdón 

*Nota de la autora: El son de la Inundación es un Blues que aún no encontré quien lo grabe. Y lo escribí después de la gran inundación en New Orleans. 


Haidé Daiban 
Buenos Aires, Argentina

6 comentarios:

  1. "Quédate aquí,
    rodeado de estos muros
    que también nos abrazan,
    en este hogar sin aristas,
    redondo como un mundo"

    En verdad que hay muchos mundos, y casi siempre es el más amable, aquel que confina con nuestros muros.

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    Respuestas
    1. Me alegra en coincidir en algunas afirmaciones, quiere decir que no estaré tan errada. Gracias

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    2. gracias, Max, me alegra en coincidir en estas afirmaciones, quiere decir que no estaré tan errada ...

      Eliminar
  2. Muchas gracias por tu lectura, Max.
    Muchas gracias, Haidé, un gusto compartir tus poemas.
    Mi abrazo y mis mejores deseos

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  3. No, no a ti.
    Solo rezaré contigo
    por la paz prometida
    por el camino justo
    por un sol naciente.
    Me ha conmovido todo el poema.
    Parece premonitorio, en estos momentos, tan crueles de la guerra en Israel.
    De todos modos me han encantado tus otros poemas.
    Un abrazo Haidé Daiban .
    Beatriz caserta

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    1. Muchas gracias por tus apreciaciones, querida Beatriz.
      Muchos cariños y mis mejores deseos

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