El signo en el nombre,
el nombre en la palabra
y ella en medio de mi frente.
Medra en pensamientos y figuras,
Imágenes que se rearman
y disfuman.
Por dentro y por fuera
tu figura en tu nombre
y mis pensamientos
en tu nombre,
que es palabra
y es signo…
Un nido, nuestro mundo
Entra, amor,
entra a la casa,
la puerta siempre abierta
te espera.
En la oscuridad
de este cuenco perfecto,
tus ojos y sus destellos
nos iluminarán
y el abrazo imperfecto,
hondo y protector,
sanará nuestra dolorosa soledad.
Quédate aquí,
rodeado de estos muros
que también nos abrazan,
en este hogar sin aristas,
redondo como un mundo.
No, no a ti
No, no a ti
padre amoroso
de hijos palpitantes.
No, no a ti
madre protectora
de dulce mirada.
No, no al obrero
de esta tierra
ayudando a un futuro
que ya no es prístino ni calmo.
No, no a ti
amigo de días felices
y cielos centellantes.
No, no a ti
que tanto luchaste,
tu mano extendida
en el alerta cotidiano.
No alzaré mi Arma
ni mi palabra hiriente
no destruiré tu esperanza,
solo rezaré contigo
por la Paz prometida,
por el camino justo
por un sol naciente.
El son de la inundación*
Blues de la inundación
Volviendo a la casa, negro,
el agua se la llevó.
Negras olas, negra el agua,
la que todo lo inundó.
Un manto de espuma blanca
cubre su honda pena de hoy.
Las lágrimas acaudalan
al río, rey y señor.
Las negras y las corcheas,
en su piano que se ahogó
cantarán un negro himno
el blues de la inundación
Negro huye, negro aúlla
Carga su desolación.
Lleva y trae el río negro,
lo poco que se salvó.
Los peces flotan su muerte,
los gritos son un adiós,
sus sones fueron tapando
la víspera de ilusión.
Blues de llanto, blues de duelo
New Orleáns, requiem-dolor.
Los cuerpos naves del río
bailan negra procesión.
Y nadie pide perdón. Y nadie pide perdón
*Nota de la autora: El son de la Inundación es un Blues que aún no encontré quien lo grabe. Y lo escribí después de la gran inundación en New Orleans.
Haidé Daiban
Buenos Aires, Argentina
"Quédate aquí,
ResponderEliminarrodeado de estos muros
que también nos abrazan,
en este hogar sin aristas,
redondo como un mundo"
En verdad que hay muchos mundos, y casi siempre es el más amable, aquel que confina con nuestros muros.
Me alegra en coincidir en algunas afirmaciones, quiere decir que no estaré tan errada. Gracias
Eliminargracias, Max, me alegra en coincidir en estas afirmaciones, quiere decir que no estaré tan errada ...
EliminarMuchas gracias por tu lectura, Max.
ResponderEliminarMuchas gracias, Haidé, un gusto compartir tus poemas.
Mi abrazo y mis mejores deseos
No, no a ti.
ResponderEliminarSolo rezaré contigo
por la paz prometida
por el camino justo
por un sol naciente.
Me ha conmovido todo el poema.
Parece premonitorio, en estos momentos, tan crueles de la guerra en Israel.
De todos modos me han encantado tus otros poemas.
Un abrazo Haidé Daiban .
Beatriz caserta
Muchas gracias por tus apreciaciones, querida Beatriz.
EliminarMuchos cariños y mis mejores deseos