sábado, 20 de abril de 2019

María Pugliese



No hablamos.

Siento que el sudor se enfría y me alerta: lo que ahora es tersa presión será tembladeral cuando marche hacia delante y quede en mis retinas la silueta de su atrás.

*  *  *

Cruje la puerta, da vueltas la llave, y dan vueltas también la melodía desde la radio, el viento, los motores. Hay tanto ruido afuera. El círculo del abrazo nos recibe y las voces refieren a cómo anduvo todo; provocamos un beso y ellos están atentos a la respiración. ¿Cómo suena el respiro?

Sus movimientos anticipan que estaba por preparar un café; Miles Davis se impone al reguero de agua, al chirriar de las chispas, a la evasión de gas y al roce de la porcelana. En medio, creo, hubo palabras. Su mirada en mis ojos se dispersa hacia otras conversaciones: está pendiente de los movimientos… se acerca y me roza las manos… se aleja y dice cuántas de azúcar –como si no supiera– dos. Su mirada en mis ojos me interroga, y sin embargo no saben qué quieren preguntar, qué quiere, qué.

La deglución intercepta a los pasos hacia el descanso, la tregua. Miles solloza y alguien deja caer un golpe en el piso de arriba. Más arriba el cielo es una furia ciega, más lejos las calles quiebran la monotonía de los transeúntes. Más cerca… más cerca… los cascos en las piedras que sajan telas tendidas a dos aguas con “Les feuilles mortes” en escena…
  
*  *  *

Cantaba el pájaro en el vergel del Amado; vino el amigo y dijo al pájaro: “Si no nos entendemos por la habla, entendámonos por amor; porque en tu canto se representa a mis ojos mi Amado”
Raimundo Lulio (España. 1235-id.-1315). Libro del Amigo y del Amado. Aguilar. Buenos Aires. 1981. Traducción castellana, anónima, publicada en Mallorca, Vda. de Frau 1749
  
*  *  *

–Buenas…
–Hola.
–Llegaste en punto.
–Vine como por un tubo.
–¿Todo bien?
–Sí,… hasta que mejore…
–Tomamos un café.
–…
–¿Cuántas de azúcar?


Del libro de la autora: Cripta de Amor. 1ª ed. Botella al Mar, Uruguay, 2018

María Pugliese
Muñiz, Buenos Aires, Argentina

2 comentarios:

  1. Querida Analia, gracias por tanto trabajo, por difundirnos y provocar este dialogo entre nuestros escritos desde hace tantos tantosAbrazos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias a vos por tus generosas palabras. Un placer difundir los textos que me envían con tanta confianza (supongo sos María).
      Muchos cariños y mis mejores deseos cada día
      Analía

      Eliminar

Muchas gracias por pasar por aquí.
Deseo hayas disfrutado de los textos y autores que he seleccionado para esta revista literaria digital.
Recibe mis cordiales saludos y mis mejores deseos.
Analía Pascaner