Obsesiones
Soñé que me besabas: era sólo el latido de tu nombre que
esa noche se durmió entre mis labios.
Palabras
Bullen en m cabeza las palabras.
Se agravian; se abrazan; se oscurecen, queriéndose sacar de escena; se gritan,
o silencian hasta que clama el corazón y un brillo inesperado lava el cuadro,
abre el nudo y emerge el poema.
La
fábrica de miel
La abeja anciana trataba de explicarle a la abejita los
misterios de la miel y sus procesos. La abejita sólo aprendió el
corolario: los secretos están en el fondo de un dulce corazón.
La vida me engañó
La hormiga cortó la hojita. Trasladó su carga, transitando
sobre un colchón de polvo rosado de aromas excitantes.
Ya a las puertas del hormiguero, la rigidez de sus patas
le señaló la naturaleza de aquel colchón rosado.
Claro, ya era demasiado tarde.
Nuestro destino, suele ser irremediablemente trágico.
Palabras con espacio
Hoy m puse a escribir, como todos los días, como toda la
vida, un cuento, un poema, no interesa, pero con suficiente espacio interior
como para que en él cupieran todos los desgarramientos del alma, los colores
del ocaso y de los ensueños, las desvaídas esperanzas, el chispazo de un
encuentro feliz.
¿Para qué? Sólo para que la muerte no tenga la última
palabra.
Alba Omil
Yerba Buena, Tucumán, Argentina
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muchas gracias por pasar por aquí.
Deseo hayas disfrutado de los textos y autores que he seleccionado para esta revista literaria digital.
Recibe mis cordiales saludos y mis mejores deseos.
Analía Pascaner