Hay un punto
en el que uno descubre
que estuvo
movido por inercia.
Y quiere sin embargo
volver.
El impulso propio
es mucho más complejo,
pero en ocasiones,
ineludible.
Aprendizaje por conveniencia
Aprender a pedir,
a formular preguntas,
a entregar
mejores respuestas.
Aprender a hablarles
a los que no queremos.
Aprender a callarse
con los amores.
Darle la espalda
a la felicidad
para seguir durmiendo
junto a ella.
Vueltas
No quiero decirle al cielo
lo que el infierno palpita.
Una larga respuesta
será suficiente
para no menguar la paz.
Cubos mágicos
Cálido suspenso,
cuando nos quedamos mudos,
cuando la palabra estorba,
los besos
flotan y se arriman.
Persigo que aflojemos el orgullo.
No te entiendo siempre,
mi instinto estira mordiscones,
mi consciencia crece
si me entrego al juego.
Te pido: liberá el temor
y olvidate el punto ciego
de tu retina.
Algo superior festeja,
y lanza los dados.
Nuestros nombres
ruedan por el piso.
Del último libro de la autora: Elemento: Juego, 2018
Karina Raponi
Nació en Merlo, Buenos Aires. Reside en San Isidro, Buenos Aires, Argentina
Con un algunas señales de hermetismo no exento de un toque de azar, estos poemas sugieren el reclamo de un punto de inflexión entre la propia conciencia y el costumbrismo. Gracias.
ResponderEliminargracias Lidia por tu palabras... saludos!
ResponderEliminar"La duda nacida en la certidumbre,,," Mallarmé
ResponderEliminarHermosas poesía preferentemente Cubos Mágicos
felicitaciones
Muchas gracias, Lina y Gustavo.
ResponderEliminarMi abrazo