La rosa llora su muerte temprana
sobre una blanca hoja inmaculada.
La rosa sucumbe a la hora anticipada
bajo una cadencia de sueños y lágrimas.
Sobre la túnica pálida de la aurora
llora mi alma.
Verdor
El húmedo verdor del parque
cae sobre la lluvia fría de la nostalgia
mi corazón errante busca la fantasía
de aquella llovida tarde
quizás vuelve todavía la fenecida llave
de la triste calle donde las gotas caen
a buscar tu suave imagen corre el alma mía
mientras la lluvia cae.
Todo pasa
Llegó a mis manos un jazmín tardío,
Siento que tú lo has enviado, blanco de fragancia,
su espíritu esparce en la muda casa
¿Mensaje del cielo? Caricia que abrasa
mi pena se esfuma, mi angustia tan sola,
me deja perfume de tardes lejanas,
de loca esperanza. Ya no soy la misma;
no sueño, despierto y no me arrepiento
de cambiar en nada. Pasan los dolores,
cesan las demandas, los afanes pasan.
Y todos tus sueños han sido balandras,
Cadenas de humo, rocas y corazas
Que ciñen los lomos de todas las brasas.
No ha quedado nada, ni aun las cenizas
que alberga mi alma crepitan dolientes.
Todo al fin declina, menos mi esperanza
Último poema tomado de: https://elblogdeasolapoargentina.blogspot.com
Alba Aída Oliva
Mataderos, Buenos Aires, Argentina
Como el amor tiene muchas facetas, se me ocurre que en estos poemas la esperanza amorosa se perfila a través de flores y hojas. Muy buen punto, se agradece.
ResponderEliminarMuchas gracias querida Lina.
ResponderEliminarCariños