No tengo voz.
La dejé esperando una palabra
en el ángulo incierto de la tarde.
No pude articular ni una sílaba
y fui como el silbido de ese viento
que traspasa la copa de los árboles
meciendo soledades.
El nudo en mi garganta
se quiso volver llanto
y tuve que tragarme hasta el último acento
porque no entenderían
que era por esta tierra dolorosa.
Y me volví silencio,
silencio sin retórica.
Fue ayer cuando me dijo el árbol:
-No eres nadie,
tan solo con dos ramas
y dos raíces en tierra.
Eres débil y tu copa parece
un final sin terminar de la espesura.
Mira la sombra que produce mi copa.
Y me vi reflejada
en el espejo redondo de una lágrima.
Y miré la majestad del árbol
y entendí porque mi voz
era un tallo quebrado en mi garganta.
Y ya no tengo voz,
porque grité tan alto
que cimbré la copa engreída de ese árbol
y doblé mis ramas
hasta tocar la punta húmeda de mis raíces
y la tierra se abrió sin hacerme preguntas,
como si comprendiera mi silencio
y perdonara
sembrando ante mis ojos
multitud de semillas con las voces
que quisieron callar y florecieron.
La esperanza
Ya anduve atardeceres
y fui con las auroras
a surcar por encima de tus sueños.
¿No crees que ya pasaron las libélulas
que debieron anunciar que llegarías?
Y me quedé esperando en ese ocaso
que inventaste para mí esa tarde.
-No esperes nada,
dijeron los silencios del arroyo
que baja de las altas serranías,
reflejando el vuelo de las aves
cuando completan su círculo amoroso
y vuelven, colmados sus instintos,
a su lejano peregrinar de verdes nuevos.
Y no volví a esperar,
Traigo aroma de madera derramada
bajo la húmeda soledad de los recodos
y el color de la herida que el relámpago
abrió en el cielo gris de la tormenta.
La desnudez del agua transparenta mi cuerpo
y tengo la limpidez del aire que se adentra en la sangre
con el rojo calor de los incendios.
No me importan la noche ni los vientos,
ni su ausencia vagando en los rincones.
Hoy se llenan de luces mis pupilas
cuando despierto y sé que ya no espero.
María José Calatayud Ponce de León
Costa Rica
Muy lindos poemas que disfruto y saboreo con placer
ResponderEliminarMuchas gracias.
EliminarCordiales saludos