Me miro en el espejo y sé que soy la otra. Allí está la que sabe, la que planea, la que continúa. La guerrera iluminada por dioses angelicales que protegen. Hay flores violetas que lo anuncian.
Yo lo sé, pero la otra que no soy yo y soy yo, no lo sabe; cae por los laberintos sin poder escapar hacia los campos dorados que son de las dos.
Sin embargo la otra soy yo que no lo soy, la cobarde, la que llora, la que pierde. Soy la otra. La que olvida los preceptos que espinosamente aprendió.
Los lagos, los ríos, los mares en los que sus ojos se deleitaron con imágenes abrillantadas y lejanas son recuerdos cubiertos por espesas brumas. Allí están los que se fueron y no sabe si la ven.
La otra soy yo. La cantante, la actriz, la artista, la sabiduría, la que reflexiona, la que observa. Es la otra que no lo sabe. La llovizna turbia cae sobre ellas.
Estoy sola. Siempre. Quise ahuyentar a los seres, pero no se fueron. No los veo. La otra sí los ve; iluminados. La que soy, tiene oscuridades.
La del espejo quiere liberarse, la otra no la deja. La empaña con tenebrosidad. La del espejo es seguridad, la otra perdió el valor. La ira y el resentimiento son capas que desmoronan.
Sin embargo un camino nuevo, llano, fácil se vislumbra. La otra que soy yo y cree que soy la otra se fundirán en una sola. Se erguirán como las diosas del Olimpo, del hechizo, la alegría y la belleza, las Tres Gracias.
Volverán a danzar y reír. Se fusionarán por fin. Es entonces que el espejo centelleante reflejará una sola apariencia.
Febrero 2021
Lila Levinson
Mendoza, Argentina
Impecable relato que tiene cierta connotación psicológica. Tal vez fue inspirado por el cuento "Borges y yo", lo que en todo caso me parece excelente. Abrazos.
ResponderEliminarperdón. Recién me llega . qué alegría que les haya gustado. Algo pasó en internet que no lo visualicé antes. Analía muchisimas gracias
Eliminarleo a Borges pero justo "Borges y yo" no lo hice, De inmediato me pongo a buscar en google para leerlo. Muy agradecida del comentario
EliminarQué interesante dicotomía en una dualidad tan bien comprometida. Me encantó Lila. Siempre un placer leerte. Gracias a tí por compartir y a Anita por editarte. Abrazo mendocino
ResponderEliminarMil gracias. Pronto enviaré mas cuentos, Abrazo
EliminarAgradezco los conceptos, Lina y Ana.
ResponderEliminarMuchos cariños
Analía
Otra vez gracias Analía
ResponderEliminarUn placer publicar tu cuento, Lila.
EliminarCon gusto recibiré tus textos.
Mi abrazo