domingo, 9 de septiembre de 2007

Editorial

…………………………………………Pies, ¿para qué os quiero si tengo alas para volar?
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Frida Kahlo

con voz propia nº 11 - septiembre 2007


Tiempos extraños vivimos.
Tiempos en los que una pequeña parte de la población pide olvido.
Los escritores necesitamos de la memoria para denunciar o simplemente ejercer nuestro oficio de escribir. Hay quienes piden olvido con sotana o sin ella, con uniforme o sin el, pero trajeados de cómplices para el innegable espejo, elemento éste trabajado con maestría por Borges, nuestro máximo Inspector de Aves y Huevos, autor de aquel memorioso Funes.
La memoria tiene que ver con la literatura mucho más de lo que los mismos escritores creen, y a veces la memoria se refugia por suerte en los libros, los que a veces son quemados es cierto, pero alguien recordará. Por eso cuando escritores jóvenes o no tanto, dicen que no leen para no sentirse influenciados, sólo están encubriendo su ignorancia. ¿Qué mejor que dejarse influenciar por los grandes?
¿Por quién se deja influenciar nuestro joven aspirante a escritor?, ¿por Tinelli, por Grondona, por quién? Y otros aseguran escribir para ellos. Una endeble excusa. Nadie escribe para sí mismo. Todos los que garabateamos papeles o maltratamos teclados lo hacemos con el fin de comunicarnos y no existe comunicación si otro no lee. Por otra parte no hay texto literario sin lector.
No es fácil en estos tiempos de estupidización general mediante cursos facilitados por Tinelli y sus cofrades, inducir a la gente a leer aunque sea para que no olviden que lo mejor de esta nación, compuesta por cinco países, se hizo con la cultura del trabajo, no de la prebenda o el bolsón.
Tiempos difíciles para los escritores cuando en los paneles televisivos opinan lindas señoritas huecas, políticos mentirosos o los eternos figurones de siempre. En los países civilizados invitan a pensadores, escritores o técnicos. Y surge la pregunta ¿seremos peligrosos los escritores en un país que ha abandonado la lectura? ¿por qué nos excluyen? ¿tienen miedo de que hablemos? Pensemos, tal vez además de escribir convendría hablar con la gente y, rechazando el olvido, empezar de nuevo la ciclópea tarea que se impusieron Alberdi y Sarmiento, de educar al soberano.

Julio Carabelli


* * *

La literatura debe cada vez más parecerse menos a una lectura invernal a la orilla del fuego que a la travesía de un bosque lleno de gérmenes vivificantes o un ascenso a las cumbres donde es preciso estar totalmente alerta.
Luis Franco



............................Edición y dirección: Analía Pascaner
............................San Fernando del Valle de Catamarca
............................Catamarca – Argentina




LA PIEDRA
El distraído tropezó con ella.
El violento la usó como proyectil.
El emprendedor construyó con ella.
El campesino, cansado, la utilizó de asiento.
Para los niños fue un juguete.
Drummond la poetizó.
David mató a Goliat.
Y Michelangelo le sacó la más bella escultura.
En todos estos casos la diferencia no estuvo en la piedra sino en el hombre.
FM Milenium (Buenos Aires)



5 comentarios:

  1. Fantástico texto de Julio Carabelli. Leer, recordar, escribir ¡PENSAR! No creo que haya otra salida.

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  2. muy buna reflexion de julio, no olvidar, no perdonar.Apoyemos a los escritores nuevos sin animos de educarlo simplemente con ejemplo y en libertad.
    analia te felicito por tu trabajo

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  3. ni olvido, ni perdon.Creando no destruyendo, en libertad.
    los torturadores se fueron, los menemistas se fueron y tinelli se ira,pero los poetas siempre estaremos...

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  4. ni olvido, ni perdon.
    poesia siempre poesia

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  5. preciosa la parábola del final

    en los países civilizados (si es que españa lo es) me temo que también invitan a señoritas huecas, políticos, figurones, etc., más que a escritores

    pero en fin, a río revuelto ganancia de pescadores, y a inteligencia brilla más si abunda menos, y

    amor

    :-)

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